Porter Magazine y su éxito... ¿Hasta cuándo?

Me gusta cuando aparecen proyectos arriesgados ante la incertidumbre económica actual (evidentemente hablo a nivel global). Porter, la nueva revista en papel de Net-a-Porter, lo es. El portal más prestigioso de venta de lujo online decide tirar adelante esta iniciativa, ir más allá del retail y convertirse en un medio de comunicación basado en la creatividad comercial.

Para que luego tenga éxito hay que ser hábil. No hay suficiente en conquistar a los clientes, que son una minoría de alto nivel (curiosamente les llaman EIPs: Extremely Important People), si no que hay que ganarse al resto: los soñadores. El primer número fue uno de los más mediáticos: todo el mundo quería tener un ejemplar en sus manos y compartir una foto en Instagram. Eso sí... en una mesa bonita, al lado de un buen desayuno, con un filtro que lo hiciese todo maravilloso y junto con una frase de "Good morning". Una maravillosa y natural Gisele Bundchen en la portada lo hacía todo más fácil.

He ahí la primera regla de su éxito: convertir Porter en un objeto de deseo. Especialmente para los que no nos podemos permitir comprar lo que hay dentro, pero nos encanta ojear, imaginar, admirar...

Después del éxito (y 70 mil seguidores en Instagram) vino la segunda regla: crear intriga. Primero anunciando que podías saber el nombre de la siguiente protagonista de la portada instalándote la app "I am Porter". Dicho y hecho. Miles de descargas y de consecuentes registros. Después publicaron una portada con solo unas orejas gigantes de Mickey con una pista: ¿Quién llevaría un gorro como éste?

Está claro: la escogida es Lady Gaga. Millones de fans equivale a repercusión asegurada.

¿Qué le hace diferente éste reportaje fotográfico de otros a la extravagante cantante? Precisamente la falta de extravagancia. La desgarradora naturalidad, su lado más normal, el que todos curioseábamos con ver. Y ahí lo tenéis, otro número que todos corren a comprar para hacerse una foto con él.



Y así seguirá. Edición tras edición. Cada número será una historia, una estrategia, y nos llamará la atención de una forma u otra. ¿Hasta que nos cansemos?